Un país del revés.
Cuando mi hijo era pequeño, a su madre y a mí nos pedía todos los días un cuento para irse a dormir. Los que más le gustaban eran los inventados, su Madre tenía las historias de Fantaspulido y Fantasmarrano y yo las de Un país del revés.
Presento uno de los que pueden existir, ya que todas y todos, tenéis un mundo del revés propio, esperando a salir.
Es de mal gusto tomarse demasiado en serio lo que os voy a contar.
En este país del revés los padres lloran por tener que ir a la cama.
Sus hijos con paciencia les explican: “mañana hay que trabajar”,
y aún lloran más.
En este país tenemos un puñado de periodistas que no mienten.
Tenemos una trabajadora que se afilió a un sindicato libertario
después de escuchar la canción “Descanso dominical”.
Tenemos delincuentes con toga que juzgan
y encarcelan a inocentes.
En este país M punto da clases de dialéctica,
y el botín está en manos de los emigrantes que llegan.
En el país del revés los toreros se han extinguido,
las televisiones son obligatorias en los salones de las casas.
Ver los informativos, el parte,
es obligatorio para cobrar el paro y demás ayudas sociales.
Sin el necesario certificado de ver a diario las noticias
durante al menos tres meses, no tienes derechos, y punto.
Este país está en un mundo donde no hay guerra,
ni se pisan los derechos humanos.
Los pobres no están en la categoría de humanos,
ni las clases medias, ni las mujeres,
ni los que trabajan.
En este país se realizan leyendo poesía y novela,
viendo teatro, escuchando música.
Todas las mujeres pintan,
y los hombres realizan la mayoría de las tareas del hogar.
En mi país una princesa llora porque no quiere heredar
y sueña con dirigir películas porno,
su favorita es garganta profunda siete.
En el país del revés se necesita un curso de preparación
de tres años para poder votar,
con examen final.
El nivel básico te habilita para votar en las elecciones locales.
El nivel medio te habilita para votar, también en las elecciones autonómicas.
El nivel avanzado te habilita para votar, además en las elecciones generales.
El excelente te habilita para votar, por último en las elecciones europeas.
Para presentarse a política o político de estado
tienes que pasar un máster de engaño, mentiras y corrupción,
“con un nivel aceptable”.
Para ser de la oposición solo exigen el certificado
de mosca cojonera.
Como la princesa está triste por no poder ser directora y actriz,
el puesto de rey se sortea cada tres años entre las y los más inútiles,
con certificado de ver más de cinco horas la televisión
o en su defecto las redes sociales,
a excepción del canal para eminencias, llamado TikTok.
Hace seis años me tocó a mí.
En este país algunos empresaurios les abonan
a sus trabajadores el salario,
y les dan, las vacaciones pagadas que les corresponden.
Esto es de todo punto intolerable y está perseguido por ley.
En este país del revés, las autopistas del cielo están llenas de coches,
tienen que esquivar los sueños y las nubes de bits.
En este mundo no hay problemas con las pensiones,
a los cuarenta se sacrifican a los no humanos
por el bienestar de la sociedad.
No lloréis, no sufren, son solo carne para alimentar un planeta
repleto y alocado.
Gracias por llegar al final de este cuento del revés.